Todo comenzó desde antes de imaginarlo.
Marlon y yo estudiamos juntos la universidad en Monterrey en el 2005, el estudió Mercadotecnia y yo publicidad por lo que en realidad no compartimos el aula nunca, pero teníamos muchos amigos en común, una de esas amigas en común se casó y coincidimos años después en su boda, cada quién con su cada cuál, supongo que de ahí nos agregamos en redes sociales.
Yo tenía a penas un mes de estar viviendo en Playa del Carmen después de una caótica situación en la cuál decidí que era el mejor momento de vivir como siempre soñé, en la playa, libre de pensar, ser y hacer lo que quisiera.
Llegué a playa sin mas expectativas que disfrutar el presente, sanar y hacer negocios. Los primeros meses iba y venia a Monterrey al menos una vez al mes.
El 26 de Mayo del 2019 en la gran final de Tigres vs León nos re conectamos. Yo quería ver el juego de Tigres y Marlon justo publicó en Facebook:
Yo solo pensé, «Oye! ese hombre tiene todo lo que necesito en este momento!» y pues resulta que si! jajaja
No me contestó el mensaje, así que fui con una amiga a ver el juego. Al día siguiente me escribió, nos vimos en la semana en Zenzi y luego Reef, no puedo decir que fue amor a primera vista porque ni el ni yo estábamos buscando algo, pero lo que si fue, fue amistad a primera vista.
Marlon me adoptó como su amiga, le presenté a mis amigas, me presentó a las suyas, fue un gran anfitrión playense, me escuchó, salimos con amigos, comimos pizza, tomamos vino, me compartió oraciones, estuvo al pendiente de mi y yo de él.